Lamentablemente los alrededores del cauce, aguas abajo, sufren un gran deterioro ambiental puesto que está ocupado por un huerto y hay varias pozos, vallas y obras de canalización.
Los más osados pueden subir, entre jaras, cantuesos y enebros, al nacimiento de la cascada (cuidado con las resbaladizas piedras) y contemplar y fotografiar, una vez más el embalse en la lejanía o seguir el cauce del arroyo, que discurre aguas arriba entre viejos olivos y antiquisimos muretes de piedra. La sierra de Orellana se une con la de Pela para producir un exquisito aceite de oliva. Ambas, junto con el embalse, sirven de refugio a numerosas especies vegetales y animales, especialmente aves, y se ofrecen generosamente a biologos, ornitólogos, fotógrafos, senderistas y otros amantes de la naturaleza.
El agua siempre presente.
ResponderEliminarMagníficas vistas.
¿ Algún resto arqueológico por la zona ?
Saludos.
Existen unas cuevas con pinturas rupestres pero, según mi amigo Manuel, están en fincas privadas y es muy dificil acceder a ellas. Como ves, la cultura siempre al alcance de la mano.
ResponderEliminarHasta pronto.
Me alegra ver, Jesús, que has estado por aquí. Veo tus fotos del Chorrero y del pueblo. Espero que lo hayas pasado bien.
ResponderEliminarUn abrazo
Por cierto, las pinturas rupestres están en la finca llamada Hoyo de Pela. Supongo que si habláis con el encargado y le decís que os deje entrar, no pondrá pegas. Yo las conocí así. Están muy bien, son esquemáticas, de colores rojizos y se encuentran, no en una cueva, sino en un abrigo rocoso con unas vistas espléndidas.
ResponderEliminarUn abrazo
Warlock,gracias de nuevo por tu información. Apunto el Hoyo de Pela en mi larga lista de lugares interesantes donde ir.
ResponderEliminar¡Hasta pronto!