No está claro de donde procede el actual nombre de Extremadura, una tierra olvidada y a menudo menospreciada. Algunos historiadores opinan que quizás proceda del término con que se conocía en los reinos cristianos a los territorios situados al sur de dicho río.
Desde aquí solo pretendo hacer un pequeño homenaje a la tierra donde ahora vivo. De ella es mi mujer y en ella han nacido también mis dos hijas.

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miércoles, 22 de enero de 2025

¿quiénes somos? ¿de donde venimos?

Desconozco totalmente la fiabilidad a nivel científico de la web https://www.unitedexplanations.org/ en la que, sin embargo, he podido leer un artículo que he creído interesante y que os comento a continuación. 

Básicamente en dicha web se afirma que, en contra de lo que creemos la mayoría, nuestro ADN no tiene una gran carga romana o musulmana, a pesar de los siglos que ambas culturas permanecieron en la península ibérica, sino más bien prerromana (pueblos celtiberos o incluso anteriores). Igualmente, desde el punto de vista genético, en general tenemos más similitudes con irlandeses, bretones, galeses o portugueses (ósea, la fachada atlántica), que con magrebíes, italianos y resto de europeos.

Es decir, el sustrato indígena mezclado con diversos pueblos procedentes de Europa antes de la llegada de los romanos, permaneció a pesar de las frecuentes invasiones y numerosas vicisitudes que durante 2000 años tuvieron lugar en la península.


Pinturas esquemáticas. Calcolítico. Helechal. Badajoz.

Edificio Protohistórico de La Mata.
Edad del Hierro.
Campanario. Badajoz

Puente romano de Alcántara. Cáceres,

Santa Lucía del Trampal. Atribuida al periodo visigodo.
Alcuescar. Badajoz.

Escritura. Período islámico.
Museo Arqueológico de Badajoz.
 

Iglesia de Santiago (Medellín. Badajoz) una de
las escasas muestras de tradición románica existente
en Extremadura, construida em las inmediaciones
del teatro romano a finales del siglo XIII.


Culturalmente, sin embargo, no ocurrió lo mismo. Innumerables son los rasgos culturales que griegos, fenicios, romanos, visigodos o árabes han ido dejando a lo largo de los siglos en nosotros, tanto en el idioma, como en el paisaje urbano y natural, la toponimia, el patrimonio monumental, gastronomía, etcétera. Sin embargo, tal vez debido a que en estas invasiones predominaron las elites, sustituidas posteriormente por otras clases dominantes, no hubo tanta huella genética como siempre hemos pensado.

Curioso también, el hecho de que en Portugal, siempre según la web señalada anteriormente, el porcentaje de personas que portan ADN norteafricano es mayor que en España, quizás debido a la expulsión de los moriscos a partir de 1609 y su posterior huida al país vecino de muchos de ellos. 

Supongo que en el futuro, nuevos estudios corroborarán o rebatirán estas teorías. Habrá que estar atentos...