Lógicamente,
esta maravillosa obra no solo tenía carácter decorativo, sino que también fue
concebida como instrumento para la enseñanza de la Astrología, ya que en esa
universidad esta disciplina contaba incluso con una cátedra desde 1460. Opinan
los expertos que el autor de este fresco utilizó los conocimientos y los
consejos que los docentes le proporcionaron para plasmar las constelaciones,
signos del Zodiaco y otros elementos de la esfera celeste.
Pero, ¿qué
relación existe entre esta obra salmantina sin igual y el cielo extremeño? Pues
que precisamente en el territorio que hoy conocemos como Extremadura hubo un
cielo de similares características al referido anteriormente. Al menos eso es
lo que nos dejó escrito el villanovense Alonso Torres y Tapia, cronista de la
Orden de Alcántara, allá por el año 1763, cuando da cuenta de que, en el Partido
de la Serena, entre finales del siglo XV y principios del XVI, se asentó un
noble plasentino que hizo levantar sendos palacios y que atrajo consigo varios
de los personajes más renombrados de la época en el terreno cultural. Estamos
hablando del mecenas don Juan de Zúñiga y, entre otros, del gramático Antonio
de Nebrija y del astrólogo Abraham Zacut:
"El judío Astrólogo Abasurto (Abrahm
Zacut) le leyó la Esfera y todo lo que era lícito saber en su arte; y era tan
aficionado que en un aposento de los más altos de la casa hizo que le pintasen
el cielo con todos sus planetas, astros y signos del Zodiaco. Ya hoy está esto
muy deslustrado con la antigüedad. En estos estudios y exercicios, y en el
gobierno de aquella provincia pasaba su vida el Maestre.”
Es
decir, existió -tal vez en el castillo de Arribalavilla de Zalamea de la
Serena, quizás en el palacio de Villanueva- un techo pintado con los elementos
del cielo mediante el cual, Juan de Zúñiga y sus maestros se iniciarían en los
rudimentos de la Astrología.
Convento concepcionista de Villanueva de la Serena (Badajoz), en cuyo solar estuvo uno de los palacios que se “hizo labrar en la parte de poniente” el noble plasentino Juan de Zúñiga. |
Interior del Castillo de Arribalavilla, (Zalamea de la Serena, Badajoz.), donde es muy probable según distintos estudiosos, que Antonio de Nebrija compusiera la primera gramática en castellano. |
Se da la circunstancia de que, según indican los expertos y estudiosos de la referida obra, el afamado astrólogo judío Zacut, -y en este punto es donde me baso para señalar que ambos cielos, el de Salamanca y el del palacio de Zúñiga en La Serena, tendrían bastantes similitudes- sería uno de los docentes que indicó al pintor Fernando Gallego los elementos celestes que debían aparecer en el techo de la biblioteca universitaria salmantina. Estos mismos elementos estarían también presentes en “uno de los aposentos de los más altos” de uno de los palacios de La Serena, ya que como dejó escrito Torres y Tapia, este astrólogo, además de ocupar un lugar importante durante un tiempo en la Universidad de Salamanca, estuvo también muy cerca de Juan de Zúñiga. Tan estrecha fue esa relación que Zacut dedicó a su mecenas, que previamente le había hecho el encargo, una de sus obras, compuesta durante una estancia en Gata cuando corría el año de 1486:
“Ouo
por bien mandar a mi, Rabi abrahan zacut de Salamanca, astrologo, su criado,
que conpusiese un tratado breve en las ynfluencias del cielo para que con este
mas se ayudasen los médicos de su señoria sy fueren astrólogos.”
"Y era tan aficionado que en un aposento de los más altos de la casa hizo que le pintasen el cielo con todos sus planetas, astros y signos del Zodiaco" |
BIBLIOGRAFÍA Y
WEBGRAFÍA:
La medicina en un
manuscrito de Astrología del siglo XV. José M Cobos Bueno. Universidad de
Extremadura.
La corte literaria
de Juan de Zúñiga y Pimentel (Plasencia, 1459-Guadalupe, 1504) Fernando
Villaseñor Sebastián. Universidad de Cantabria.
Astronomía en la
Universidad de Salamanca a finales del s. XV. Lo que nos cuenta El Cielo de Salamanca. Carlos Tejero
Prieto. Universidad de Salamanca.
Zacuto, Abraham.
Daniela María López-Torrijos Moya. Universidad San Pablo-CEU.
https://sac.usal.es/patrimonio/exposiciones/el-cielo-de-salamanca/
Hay cosas que las damos como únicas pero como parece ocurrir en este caso en ocasiones encontramos algo igual o semejante, aunque ahora por desgracia desapareció.
ResponderEliminarSaludos.