Capilla es un pequeño pueblo situado en el este de la provincia de Badajoz, muy cerca ya de las provincias de Córdoba y Ciudad Real. A sus pies se extiende el Embalse de la Serena y la infinita comarca del mismo nombre y a su espalda una agreste sierra donde se asienta una fortaleza construida por los árabes para dominar las comunicaciones entre Mérida y Córdoba. Ellos la llamaron Cábala pero posteriormente se denominó Capella.
Las vistas que desde este castillo se pueden divisar son, una vez más, impresionantes y aunque el estado de este es ruinoso, el lugar es uno de aquellos de obligada visita para los amantes de la Naturaleza y de la Historia de esta comarca. El casco urbano es pequeño y apenas viven en él doscientas personas, pero hubo un tiempo en que este pintoresco pueblecito fue capital del Estado de Capilla. Eso fue tras la conquista de estas tierras por el Rey Fernando III y su posterior cesión a la Orden Militar del Temple. Tras la disolución de esta pasó a la Orden de Alcántara.
Este Estado incluía las villas de Baterno, Risco, Garlitos, Capilla, Peñalsordo y Zarza Capilla y tenía su principal sustento en los pastos que aprovechaba el ganado de los nobles y vecinos en verano (agostadero) y de los norteños de la Mesta durante el resto del año (invernadero). Este aprovechamiento indiscriminado y abusivo de los pastos ha modelado sin duda el paisaje de gran parte de la Serena convirtiéndola en una llanura, a veces inhóspita, donde se pierde la vista en el horizonte sin divisar un sólo árbol.
Afortunadamente algunas abruptas sierras conservan todavía reductos de vegetación de bosque mediterráneo aunque algo alterado. La ruta senderista Transerena tiene en Capilla su punto de partida, discurriendo sus primeros tramos por las sierras de Peñalsordo, Cabeza de Buey y Castuera para acabar, tras pasar Campanario, en La Haba. (En la página web del Ceder La Serena se puede encontrar detallada información de esta ruta.)
Cualquiera de estos tramos son adecuados para recibir a la primavera después de meses de lluvias pero, es una buena opción elegir el primero de ellos y pasear por la laderas del Peñón del Pez mientras a tu alrededor se produce una explosión de miles de flores silvestres de distintos colores, y de diferentes olores y sensaciones.
Cualquiera de estos tramos son adecuados para recibir a la primavera después de meses de lluvias pero, es una buena opción elegir el primero de ellos y pasear por la laderas del Peñón del Pez mientras a tu alrededor se produce una explosión de miles de flores silvestres de distintos colores, y de diferentes olores y sensaciones.
Debe ser también muy interesante estar por allí durante las Octavas del Corpus, ya que durante estas fechas se celebra la conquista del castillo. Cuenta la leyenda que ante la resistencia que los moradores de la fortaleza oponían a los soldados castellanos, estos urdieron mandar un "ejército" de carneros con antorchas amarradas a los cuernos, de manera que, los sitiados al ver en la oscuridad de la noche aquellas luces subir por las laderas del castillo, creyeron encontrarse ante un poderoso ejército y rindieron la plaza. Desde entonces se celebra en el vecino Peñalsordo una fiesta llena de color y de música que ha sido declarada de Interés Turístico Regional...
Preciosas fotos y bonitos pueblos. Para mi sorpresa, la mayoría con los que hablo no los conocen, y están a sólo 90 kms.
ResponderEliminarPor cierto, te dejo este enlace, donde te explican cómo poner en el blog tus fotos de picasa moviéndose:
http://ciudadblogger.com/2009/10/slideshow-de-fotos-con-picasa.html
Un saludo.
Gracias Josito. A ver cuando tengo tiempo...
ResponderEliminarEs verdad que esta zona es poco conocida y en ello está parte de su encanto, pero como he comentado en tu blog, el problema de la despoblación es brutal. Este es un problema histórico, desde que los castellanos conquistaron estas tierras, puesto que fracasaron las colonizaciones que se fueron realizando y después se agravó con la expulsión de los moriscos.
Un saludo.